¡Hola, hola!
Llegó el momento, ya tengo cubierto mi fondo de emergencia y he empezado a cultivar mis ahorros y el dinero está ahí, en una cuenta de ahorros, creciendo unos míseros céntimos al mes que, aún siendo muy poco, son el inicio de unos ingresos pasivos que irán en aumento, pero ¿cuál es el siguiente paso? ¿Cómo acelerar el proceso?
Pues ahora toca que esos míseros céntimos al mes se multipliquen y empiecen a generar más y más dinero. Es hora de poner a mi dinero a trabajar para mí y la manera en la que yo (y mucha más gente) lo hice es invirtiendo en el mercado bursátil, pero antes de entrar en detalles de cómo lo voy a hacer vamos a ir paso a paso para que este proceso sea lo más sencillo posible para alguien que no lo ha hecho nunca.
El primer paso es elegir el tipo de inversión que queremos hacer. Para ello tienes que tener clara tu estrategia. ¿Quieres crear riqueza de forma pasiva y que perdure en el tiempo? ¿Quieres multiplicar tu dinero de manera rápida manejando activamente tus inversiones? Depende de lo que quieras, tendrás que hacer una cosa u otra. Hay muchas maneras de invertir tu dinero y no voy a entrar a hablar de todas ellas en esta entrada porque no viene a cuento, ya que vengo a contarte sobre la bolsa de valores.
Pero Edu… ¿Invertir en bolsa no es súper arriesgado y puedes perder todo tu dinero de un día para otro? Pues sí y no. Me explico: Hay que diferenciar riesgo y volatilidad:
– Riesgo es la posibilidad de tener menos dinero que lo que invertiste al cabo de un tiempo X (Ejemplo: Inviertes 1000€ en acciones de una empresa y al cabo de 5 años la empresa quiebra y pierdes todo el dinero, o compras una casa por 130.000€ y a la hora de querer venderla ha perdido valor y ahora vale 100.000€).
– Volatilidad le llamamos a la fluctuación en valor de las inversiones (Ejemplo: Compras hoy acciones de Tesla por valor a 100.000€ pero mañana a Elon Musk le da por tuitear que sus acciones están muy caras y de repente se desploman un 20% haciéndote perder 20.000€ en un día, pero la semana siguiente anuncian que van a incluir a Tesla en el fondo S&P500 y las acciones vuelven a subir por encima del valor al que las compraste, haciendo que tus inversiones valgan 130.000€ ahora). Los números no son reales, sino únicamente para ejemplificar lo que quiero decir.
Espero que los ejemplos que he dado hayan sido claros y se entiendan bien. Sin embargo, debemos entender que toda inversión conlleva riesgo, ya que siempre nos exponemos a perder dinero, ya sea a corto o largo plazo, pero no todas las inversiones son igual de volátiles (una casa no pierde valor hoy y mañana lo gana, sino que es algo que pasa en un periodo más largo).
Como he dicho más arriba, tenemos que tener claro cuál será nuestra estrategia en el mercado y ahora te voy a desarrollar un poco lo que quiero decir con esto:
– Estrategias activas: Este tipo de estrategia requiere de tu atención para poder generar beneficios. Tienes que estar al tanto de los movimientos del mercado e informarte de las compañías en las que vas a invertir para poder intentar predecir lo que va a pasar con sus acciones y comprar barato para vender caro en un corto plazo de tiempo. En este grupo entran estrategias como «day trading» o «swing trading», entre otras.
– Estrategias pasivas: Esta es la forma más fácil de generar riqueza en el mercado, ya que sólo necesita de tu atención al principio, cuando eliges el producto en el que vas a invertir y, quizá una vez al año para rebalancear tu cartera. La más extendida es la de «buy and hold» que significa «comprar y retener». Básicamente compras las acciones y no las vendes en un largo periodo de tiempo (20-30 años) o no las vendes nunca (hablé de ello cuando te conté sobre la regla del 4% en este post).
Personalmente yo, que soy bastante vago, prefiero que mi dinero trabaje sin que yo tenga que decirle nada, por lo cual, voy a decantarme por una estrategia pasiva invirtiendo en Fondos Indexados; por lo cual, es de esta de la que voy a hablar aquí hoy.
Una vez sabemos qué estrategia queremos, toca elegir dónde abrir nuestra cuenta de inversiones. Para esto tenemos varias opciones en España: con un banco, un broker o un robo-advisor (suena feo este último, pero viene de robot, tranqui). Puedes entrar en este enlace del blog de La Hormiga Capitalista, -que me parece de los mejores blogs de inversión que existen a día de hoy, y tenemos la suerte de que está escrito en español- donde tiene enlaces muy interesantes sobre cómo elegir tu broker y, además, un buscador de fondos indexados.
Como sabrás, si has leído mi historia, yo no resido en España actualmente y, por varios motivos, no puedo abrir una cuenta en España, así que estoy en proceso de abrir una cuenta aquí en Australia para invertir en fondos indexados (estoy teniendo problemas con unos documentos que me piden, ya mismo lo tengo resuelto y te cuento). Es por esto por lo que no te cuento más sobre mis decisiones, ya que quiero contarte cosas que he hecho o que estoy haciendo y que no creas que te estoy vendiendo la moto. Como siempre he dicho, este es mi viaje hacia la libertad financiera, y lo estoy haciendo y contando a la vez, por lo que sabrás tanto si me va bien como si no.
Por hoy es suficiente, nos vemos en la próxima. Espero poder contarte en qué he invertido, por qué y cuánto. ¡Muchas gracias por leerme!
¡A ser libres!