¿Qué es vivir por debajo/encima de tus posibilidades?

¡Muy buenas! Hoy vuelvo con otra reflexión, que espero te aporte algo o, al menos, te haga pensar sobre esto en adelante.

Como bien dice el título, siempre se nos ha dicho aquello de «vivir por encima de tus posibilidades es malo» o «hay que vivir por debajo de tus posibilidades para estar seguro», pero ¿qué es vivir por debajo o por encima de tus posibilidades? ¿Cuáles son mis posibilidades? ¿Cómo sé si estoy por debajo o por encima? ¿Y si quiero vivir de acuerdo a mis posibilidades sin irme por encima o por debajo? Pues sobre esto estuve pensando largo y tendido y hoy vengo a contártelo.

He hecho esta pequeña clasificación por facilitar la comprensión del concepto:

  • Vivir por encima de tus posibilidades = gastar dinero que no tienes (ganas 1000€, gastas 1200€ = 200€ de deudas = preocupación)
  • Vivir por debajo de tus posibilidades = siempre tener excedente (ganas 1000€, gastas 800€ = 200€ ahorrados = aumento de tu riqueza de 200€ al mes)
  • Vivir acorde a tus posibilidades = gastar todo lo que tienes sin endeudarte (ganas 1000€ gastas 1000€ = 0€ ahorrados = tu riqueza no aumenta)

Entonces, teniendo esto en cuenta es fácil pensar que el único error es vivir por encima de tus posibilidades, porque queda claro que vas a peor cada mes, cavando más y más profundo el hoyo de la deuda, y que las correctas son vivir por debajo y acorde a tus posibilidades, porque no te endeudas. Bueno, más abajo te contaré mi forma de ver cada caso con ejemplos y, al final, te daré mis conclusiones, pero me encantaría conocer las tuyas también.

  • Vivir por encima de tus posibilidades es un error bastante grave, porque mes a mes tu riqueza decrece y tus gastos aumentan, por lo que cada mes pierdes más y más dinero. Teniendo en cuenta que nuestro objetivo es ser financieramente libres, este estilo de vida NO nos acerca a nuestro objetivo, sino que nos aleja de él. Este estilo de vida, generalmente, lo provocan las ganas de aparentar ser lo que no se es: Comprar coches nuevos o de lujo, comprar ropa de diseñador, accesorios caros, salir a restaurantes de alto nivel, etc.
  • Vivir por debajo de tus posibilidades es lo correcto ya que nuestra meta es ser financieramente libres y, con este estilo de vida, cada mes tus facturas están pagadas y tus ahorros aumentan, acercándote día a día y mes a mes a tu objetivo. Este estilo de vida, generalmente, lo provoca una buena educación financiera y una valoración real de lo que es importante para nosotros y lo que no, reduciendo así gastos sin valor real. Por ejemplo: un Ford Focus te lleva igual que un BMW Serie 1 y por una fracción del precio y una camisa del H&M te viste igual que una de Emporio Armani.
  • Vivir de acuerdo a tus posibilidades también es un error porque vives de salario en salario y cualquier emergencia (por ejemplo: tienes que cambiar el embrague del coche o perder el trabajo) te llevaría a endeudarte y te sería muy difícil salir de esa situación, ya que nunca tuviste excedentes y ahora tus gastos han aumentado. Deberías, en esta ocasión, cambiar el nivel de vida al que estás acostumbrado/a para lograr pagar esa deuda. Entonces, si lo pensamos bien, vivir de acuerdo a tus posibilidades es muy similar a vivir por encima de tus posibilidades, porque el más mínimo aumento en tus pagos te lleva a endeudarte.

En conclusión, pienso que vivir por debajo de tus posibilidades es, realmente, vivir de acuerdo con tus posibilidades. La única forma en la que nunca serás esclavo de tu dinero o tus deudas es no tener deudas nunca y, para ello, es importante tener un buen fondo de emergencias del cual salgan todos esos gastos inesperados, además de un buen colchón económico para solventar una pérdida de trabajo o un ERTE, como ha ocurrido este último año con el Covid-19. No es lo mismo afrontar un descenso en nuestros ingresos teniendo 12 meses de gastos ahorrados que sin tener nada que te mantenga a flote.

En la próxima entrada hablaremos sobre qué significa, realmente, vivir por debajo de tus posibilidades y cuánto por debajo de tus posibilidades debemos vivir. Igualmente, recuerda que las finanzas personales son personales, todo lo que escribo aquí me sirve a mí y quizá a otras personas con una situación o mentalidad parecida a la mía, pero todo es extrapolable.

Nos vemos en la próxima entrada.

¡A ser libres!

Revisando mis resultados – Net Worth

¡Buenos días! Hoy no traigo información nueva, ni trucos ni nada. Hoy vengo a contarte lo que seguir los pasos que te conté en la entrada de Cómo empezar a crear riqueza (1) ha hecho por mí en estos últimos 3 meses y medio.

Pues, por si no me conoces o no has leído mi historia, te voy a contar los pasos que decidí implementar y el cambio de mentalidad que tuve que ejecutar antes de lograr aplicar esos pasos.

Yo, al igual que mucha gente, pecaba de generarme a mí mismo una «inflación de estilo de vida». Esto es aumentar gastos según aumentan mis ingresos. Lo cual puede parecer hasta lógico porque «si gano más, significa que puedo gastar más, porque hay más dinero»; pero esto, si nuestro objetivo es vivir una vida relajada y, en algún momento ser libres financieramente, ¡es un error enorme! El resultado de la «inflación de estilo de vida» es vivir de salario en salario, no lograr ahorrar lo suficiente ni para emergencias, adquirir deudas por no tener el dinero para afrontar gastos medianos (cambiar las ruedas del coche, por ejemplo), etc.

En Agosto de este 2020, después de llevar casi 6 meses en la pandemia y viviendo en otro país, habiendo llegado a tener que pedir dinero para poder venir a trabajar y con únicamente 40 dólares australianos en la cuenta, tomé la decisión de que nunca más sería pobre y que nunca más permitiría que la falta de dinero me limitase las opciones en la vida. Así que empecé a aplicar los conceptos básicos de la creación de riqueza.

Te voy a enumerar los que estoy llevando a cabo:

  • Controlar mis gastos: Creé un documento Excel en el que controlo mis ingresos (cuántas horas trabajo y cuánto cobro por día, semana y mes), controlo mis ahorros (cuánto mando a mi cuenta de ahorros y cuánto cash me queda mensual para gastar) y controlo los gastos (cuánto gasto en cada categoría, ya sea supermercado, teléfono, ocio, regalos, etc). Esto me permite saber a dónde va mi dinero y poder tomar medidas en cuanto a los gastos que no son importantes.
  • Priorizar mis gastos: En Agosto tenía muchos gastos que creía que necesitaba (portátil, móvil nuevo, altavoz y cascos bluetooth…) pero, una vez reevalué mis prioridades, lo único que compré fue el portátil (con lo que escribo el blog) y el altavoz bluetooth (un poco capricho, pero escucho música todo el rato, así que me aporta mucho valor diario), lo demás no lo necesitaba realmente y era simplemente ganas de tener juguetitos nuevos y satisfacción instantanea.
  • Marcarme un objetivo: En Agosto me marqué una meta, la cual ha ido variando según he ido acumulando ahorros, pero tener una meta me ha ayudado mucho a eliminar esos gastos que realmente no necesito y a sentirme bien con las decisiones que he ido tomando.
  • Pagarme a mí primero: Lo primero que hago cada vez que me ingresan la nómina es apartar los ahorros a una cuenta de ahorros. Como si no existiera esa cantidad. Si tuviese un ingreso estable, lo haría automáticamente para que ese dinero nunca esté en mi cuenta principal, pero como cada semana gano más o menos según las horas que trabajo, lo hago manual, ya que ahorro un porcentaje y no una cantidad fija (y bueno, mi TOC me obliga a redondear hasta el número terminado en 0 más cercano, siempre hacia arriba).

Únicamente con esas 4 claves, he conseguido más de lo que jamás habría imaginado. Sin ese cambio de mentalidad, tendría muchísimo menos ahorrado, porque habría caído en la tentación de gastar a lo loco porque «me lo merezco» ahorrando una cantidad bastante menor y, en consecuencia, extendiendo el tiempo que me tomará alcanzar mi libertad financiera.

El fin de semana pasado calculé mi patrimonio neto -Por si no sabes lo que es, simplificándolo mucho, es el valor de restar tus pasivos (cosas que te restan dinero: préstamos, hipoteca, etc.) de tus activos (cosas que te suman dinero: cuenta de ahorros, inversiones, etc.).- y me di cuenta de que, ¡por fin tengo un patrimonio neto positivo! Lo calculé desde Agosto hasta aquí e hice un pequeño gráfico para ilustrarlo. Lo puedes ver más abajo:

Como puedes ver, he sido bastante agresivo con mis ahorros, en las cuentas de Australia estoy contando la cuenta principal y la de ahorros, y en la cuenta española cuento el dinero que ingreso mensualmente para pagar el préstamo que tengo con el banco (liabilities se traduce en español como pasivos).

Aquí puedes decirme «claro, pero es que estás ganando mucho dinero y por eso has sido capaz de hacerlo tan rápido. Yo no puedo hacerlo» y tendrías razón únicamente en la parte en la que te refieres a la velocidad en la que lo he hecho, pero estarías en un tremendo error al pensar que tú no puedes hacerlo porque cobras menos o porque tengas más gastos que yo. Simplemente te tomaría algo más de tiempo, pero el proceso es el mismo y, si lo sigues disciplinadamente y sin excusas, verás los resultados mucho antes de lo que pensabas.

Si quieres un sólo consejo en el que confío al 100% para salir del hoyo financiero o para acelerar tu creación de riqueza este es: Controla tus gastos. Ya está, con eso sabrás por dónde se te escapa el dinero cada mes. Cuando veas que te has gastado sólo un euro y pico en la panadería hoy, pero resulta que te has gastado ese euro y pico todos los días, sin darte cuenta te has gastado más de 30€ ese mes en la panadería, o quizá los cafecitos a media mañana o por la tarde que te cuestan menos de 2€ pero al final del mes se montan en casi 50€ en algo que te puedes hacer en casa por mucho menos. Esta es la única manera en la que puedes saber dónde tienes el agujero por el que se te escapan tus euros por los que tan duramente has trabajado.

Y ¿sabes lo mejor de eso? Que si encuentras el agujero, y resulta que puedes recortar tus buenos 30-40€ al mes en cosas que no te aportan nada realmente importante a tu vida, puedes destinar esos 30-40€ a cosas que sí aporten cosas a tu vida, como ahorrar para tu fondo de emergencias, invertirlos, adelantar pagos en tus deudas, etc.

Como ves, controlar tus gastos te da un poder que no te imaginabas. Te devuelve el control de tu vida financiera. Quizá ahora mismo sea poca cosa, pero con el tiempo, si lo haces constantemente, irás viendo que cada mes eres capaz de reubicar un eurito más de los pasivos a los activos y ser un poco más libre cada día.

Por hoy yo ya tengo poco más que comentar. Si te ha gustado o si crees que es mejorable, por favor dímelo en los comentarios o en Facebook, que estaré encantadísimo de aclarar cualquier cosa o de que me corrijas, si crees que me equivoco en algo.

También te invito a suscribirte para que cada jueves te enteres de inmediato cuando salga un nuevo post. Estoy trabajando duro para poder aportarte más valor cada día y que mis entradas te sirvan, así que muchas gracias por leerme y nos vemos en la próxima.

¡A ser libres!

Reprograma tu cerebro

Hola de nuevo. Vaya chapa te di la semana pasada con el tema de que estamos programados para ser pobres y que los ricos están programados para ser ricos y toda esa retahila que puedes leer aquí. Hoy vengo a complementar ese post con unos trucos para eliminar la programación «pobre» de nuestro cerebro y prepararnos para sustituirla por una programación «rica». Estos trucos los aprendí en el libro «Los Secretos de la Mente Millonaria – T Harv Eker». Recuerda una cosa: tu condicionamiento actual ha determinado las acciones que has llevado a cabo hasta hoy, produciendo los resultados que tienes a día de hoy; si no estás 100% satisfecho con ello, te interesa seguir leyendo esto con la mente abierta.

Antes de entrar en faena, primero hay que entender las 3 formas primordiales en las que se nos condiciona desde niños:

  1. Condicionamiento verbal: Lo que te decían cuando eras pequeño
  2. Imitación: Lo que veías cuando eras pequeño
  3. Incidentes específicos: Lo que experimentaste cuando eras pequeño

Condicionamiento verbal
Seguro que de pequeño escuchaste cosas como:
«El dinero no crece en los árboles»
«¿Quién te crees que soy, el Banco de España?
«Los ricos son avariciosos»
«Tienes que trabajar duro para ganar dinero»
«No nos lo podemos permitir»
«No todo el mundo puede ser rico»

Todas estas afirmaciones que escuchaste cuando fuiste pequeño/a se quedaron grabadas en tu subconsciente como parte de tu programación mental y, a día de hoy, gobiernan tus finanzas. Quizá pienses «menudo flipao», pero piensa sobre ello: cuando desde pequeño se nos relaciona el dinero con emociones de estrés o preocupación y se nos afirma que quien tiene mucho dinero es avaricioso o egoísta, y crecemos con esa convicción, nuestro subconsciente no va a querer ser así, por lo que nos hará gastar nuestro dinero para tener lo que él cree que es la cantidad que una persona «buena» debe tener.

Modelado/Imitación
Cuando nacemos, no sabemos nada, tenemos ciertos instintos básicos como el reflejo de mamar, pero estos instintos básicos no son conocimientos, sino que se convierten en ellos a medida que realizamos estas acciones de manera repetitiva o vemos a otra persona hacer cosas constantemente. De esta manera podemos ver que la imitación es de las formas más básicas en las que los seres humanos aprenden y se desarrollan, ya sea la manera en la que gesticula un niño, su cultura, su idioma, su religión (o ausencia de ella), etc. Entendiendo esto -y volviendo al tema que nos atañe- podemos llegar a la conclusión de que, según los comportamientos con respecto al dinero que tuvieran nuestros padres durante nuestra infancia, será moldeado nuestro comportamiento en un futuro. Pregúntate estas cosas:
¿Eran tus padres buenos gestionando sus finanzas, o solían estar endeudados?
¿Tus padres invertían su dinero o no?
¿Solían tus padres tomar riesgos o preferían la seguridad?
¿El dinero entraba en casa de manera sencilla o era siempre un problema?

Al responderte a ti mismo estas preguntas de manera sincera, empezarás a entender ciertas cosas ya que, generalmente, en el área financiera solemos ser iguales a uno o ambos de nuestros progenitores, pero ten en cuenta que lo contrario también puede ocurrir: algunos de nosotros decidimos rebelarnos, ya sea por ira o por resentimiento. En otra entrada hablaré sobre la importancia de tener una meta positiva a la hora de empezar a crear riqueza en lugar de una negativa como puede ser la ira o el resentimiento.

Incidentes específicos
Las experiencias que tuviste durante tu infancia y adolescencia con respecto al dinero son las que dieron forma a las creencias que gobiernan tu vida financiera a día de hoy. Cosas como:
Tus padres compraron un coche nuevo financiado / compraron de segunda mano y pagado cash
Tus padres invertían el dinero y hablaban alégremente de ello
Tus padres se veían especialmente preocupados y estresados cuando llegaban las facturas

Siempre se compraban cosas buenas y caras a crédito
Cada vez que se hablaba de dinero se decían cosas negativas o positivas

Esto son únicamente ejemplos básicos para entender de lo que hablo, obviamente cada quién tuvo sus experiencias únicas a su unidad familiar.

Ya hemos visto las tres formas en las que nuestro cerebro es condicionado para pensar de una manera específica con respecto al dinero, pero no te preocupes, que también te voy a dar los trucos para cambiar esto y tomar el control de tu relación con el dinero. Primero dividiremos este proceso en 4 partes:
1- Conciencia: no puedes cambiar algo que no sabes que existe
2- Comprensión: Cuando entiendes de dónde vienen tus pensamientos, puedes reconocer que vienen de fuera de ti
3- Disociación: Cuando comprendes que esos pensamientos no son tú, puedes separarte de ellos y elegir, a partir de ahora, si quieres seguir pensando así o prefieres desarrollar tus propios pensamientos basados en quién eres hoy y quién quieres ser el día de mañana.
4-Recondicionamiento: Introduce una nueva programación en tu cerebro.

Acciones para redirigir nuestra programación verbal
1- Conciencia: Escribe, ya sea en papel o digital, todo lo que recuerdes haber escuchado sobre el dinero, la riqueza y los ricos cuando eras jóven.
2- Comprensión: Escribe cómo piensas que estas afirmaciones han afectado tu vida
3- Disociación: ¿Puedes ver que estos pensamientos representan únicamente lo que aprendiste y no quién eres?

Acciones para redirigir nuestra programación por modelado/imitación
1- Conciencia: Considera las formas de ser y los hábitos de cada uno de tus padres en cuanto al dinero y la riqueza. Escribe qué tan parecido o distinto eres a cada uno de ellos.
2- Comprensión: Escribe los efectos que este modelado ha tenido en tus finanzas
3- Disociación: ¿Puedes ver que esta froma de ser representa únicamente lo que aprendiste y no quién eres? ¿Te das cuenta de que tienes la opción, en el presente, de ser distinto?

Acciones para reprogramar nuestra programación por incidentes específicos
1- Conciencia: Intenta recordar un incidente emocional específico que experimentaste cuando eras pequeño sobre el dinero
2- Comprensión: Escribe cómo este incidente específico puede haber afectado a tus finanzas actuales
3- Disociación: ¿Puedes ver que esta froma de ser representa únicamente lo que aprendiste y no quién eres? ¿Te das cuenta de que tienes la opción, en el presente, de ser distinto?

Te habrás dado cuenta tú también de que dividí la reprogramación en 4 partes y te he dado sólo 3 acciones en cada segmento. La cuarta viene una vez hayas interiorizado esas tres y es en el punto en el que me encuentro yo ahora mismo. Este cuarto punto ha de ser una decisión personal, porque no todo el mundo tiene las mismas necesidades. Yo, por ejemplo, quiero tener un Tesla en algún punto de mi vida y una pista de tenis en mi casa, por lo que la programación que estoy instalando en mi cerebro es la de alguien que pueda permitirse tal vehículo y tal tamaño de parcela, pero si tú no necesitas tales lujos, tu programación no será igual a la mía. Hay miles de libros, blogs y podcasts que te ayudarán con esto. El libro del que he sacado la información aquí expuesta propone una programación muy interesante. Recomiendo al 100% la lectura del libro «Los secretos de la mente millonaria».

Como siempre, muchas gracias por leerme. Espero que te haya servido de algo, y si así ha sido, te agradecería mucho que me dieras tu feedback en los comentarios, en la página de Facebook o en el grupo. Nos vemos en la próxima.

¡A ser libres!